1. La noche más obscura
Erase una vez, en un continente muy lejano llamado Mainland existían diferentes reinos dominados por reyes y reinas, elfos y faunos exepcionales que lucharon por cientos de años para mantener la paz entre los reinos y ciudades; y fue así como desde hace 500 años ha perdurado la paz en los reinos de Mainland... hasta que una nueva especie fue vista llegando en sus barcos bárbaros en las playas de la ciudad imperial de Ankrahmun.
Ankrahmun, se encuentra al sur de la ciudad mercantil de Darashia, conectada por un pasaje donde en el día se puede ver la caravana de mercantes y pescadores yendo de norte a sur para vender sus cosechas y así alimentar a sus familias, todo desde el mercado más basto de los reinos regido por el gran señor Rashid. Y fue en aquel día del calendario en que las estrellas de Aquila y Liria se consolidaron que llegaron ellos los bárbaros.
Algunos antiguos locos, hijos de marineros retirados que perdieron la cabeza entre el ron y el vino en las tavernas comentaban que existía una isla de bárbaros, que montaban en perros salvajes y cazaban a bestias gigantes con bocas de 100 dientes; esta tierra inexplorada se decía que se encontraba a 40 días y noches de viaje en barco hacia el este de Darashia. Sin embargo, nadie acreditó la palabra de un borracho loco, hasta aquel día.
La invasión fue anunciada y pronto corrió la voz a los reinos aliados de Darashia, Ankrahmun, Venore, Thais, Ab’dendriel y Yalahar. ¿Cómo se enteraron los reinos independientes? Ni piensen en preguntármelo, ellos se rigen por sus propias reglas y hablan sus propias lenguas; en muy pocas ocasiones aceptan extranjeros y a los que no les parecen los eliminan simplemente. Por semanas nos estuvimos preparando, desde que se encontró el primer barco en las playas. Los hombres forjaban el doble de armamento al día, los pescadores vendían sus cosechas para mejorar sus propios y pobres equipamentos, porque la instrucción de la corona fue “todos pelearán y los que permanezcan neutrales al terminar la pelea morirán también”. Claro que esta regla no aplicaba a la comunidad pasiva y menos en estas fechas navideñas donde teníamos a un tercio de nuestra comunidad femenina en cinta, esperando a procrear.
Las sociedad pasiva en nuestros reinos son cocineras, encargadas de la crianza de la familia, algunas son pescadoras también o agricultores... así fue como nos criaron nuestros padres y así fue como los criaron a ellos los suyos, sin embargo no creas por un segundo que esto es solamente una cuestión de género, los hombres también tienen roles pasivos en las comunidades. Verás, cuando una familia procrea, si es hombre, tiene hasta los 13 años para demostrar por medio de 3 duras duras pruebas que se llevan a cabo, que es digno de ser un guerrero y así lo reconocen con la promoción de profesión que le otorga el Rey o la Reina, para cumplir en la comunidad (de acuerdo a sus habilidades) sea Elite Knight, Elder Druid, Master Sorcerer o Royal Paladin. Las mujeres por otro lado tenemos hasta los 10 años para pasar nuestras pruebas y poder ser parte de estos roles, de otra manera tanto hombres como mujeres que no cumplieran con este requisito, pasan a la parte pasiva de la sociedad: cosecha, agricultura, pesca, mercantil.
Fue una noche de temperaturas muy frías en la que nos llegó la noticia: había caído Darama a las afueras de Darashia y con esto se confirmaba que la presencia de estos extranjeros no era pacifica. Mi padre nos despertó a Trisha y ami y nos movilizó muy de prisa, él y mi hermano Kespian tenían que pelear.
- ¿Sabes qué tienes que hacer? Repitemelo...
- Si padre. Nos refugiaremos, buscaremos a tu hermana Nelly en la ciudad independiente de Svargrond y ella nos ocultará hasta que todo acabe. ¿Por qué tenemos que ocultarnos? - Mi corazón latía a mil por hora y no quería dejarlos, pero sé que tenía que resguardar a mi pequeña hermana.
- Ahora no hay tiempo. Cuando todo esto acabe yo las mandaré a buscar. Harás lo que te digo, prométemelo... Ustedes dos son el futuro de nuestra familia.
- Si padre...
Salimos en medio de la noche por las paredes imperiales de Ankrahmun y este era el viaje más largo que habría emprendido en toda mi vida. Kespian me dio algunas armas, pociones de vida y de maná para el viaje, me dieron oro y comida para nuestra regeneración. ¿Esta mal decirles que tenía mucho miedo? Miedo de ser apenas una chica de 17 años repsonsable por nuestra propia sobrevivencia en medio de una guerra y cruzando todo el continente hasta nuestro helado destino.
...
- Despierta Eloise, feliz aniversario mi vida, ven y acercate a ver cómo Afrodita preparó las estrellas del cielo hoy para tu octavo aniversario.
- ¡Feliz cumpleaños enana! Prepárate pues me contaron que hoy es el día de tu inscripción en las pruebas, ¿estás emocionada?
- ¡Kespian!.....
- ¿De qué habla mi hermano madre? - La luz aún aturdía mis ojos pero me levanté de un salto tras el anuncio de Kespian. -¿Pero... por qué ahora? Mi amiga Nidia esperará hasta sus 9 años y dice que le dará el tiempo para hacer todas las pruebas...
El rostro de mi madre se llenó de vergüenza, no entendí si era una vergüenza hacia ella o hacia mi, empezaba titubear con sus palabras...
- Hijita, así tendrás más tiempo y oportunidades en caso de...
- De que falles Eloise... Madre, decir las cosas como son la hará más fuerte y eso es lo que necesita, la han consentido demasiado y el mundo allá afuera es duro. Tiene que salir de esta burbuja cuanto antes.
En un instante se me paralizó el cuerpo, intenté tragar saliva pero mi boca estaba seca. ¿Qué cumpleaños es este?... Solo sé que no lo puedo iniciar con lágrimas en los ojos. Me molestaba en una gran medida que mi madre dudara a cierto grado de mi. Entrar a las pruebas anticipadamente revelaría que hay algo que ve mi familia en mí, que ciertamente me expondrá ante los demás y ellos lo sabían pero su temor a mi fracaso era mayor a la exposición de mi vulnerabilidad.
Por 300 años de generaciones nuestra familia ha sido reconocida por tener a los guerreros más imponentes de las sociedades. Por sus logros nos posicionamos en un rango que solamente los que nacen con ellos tienen. Entramos a las filas de los grandes comandantes, somos nobles por nombre y designio sin serlo por nacimiento y es por esto que puedo entender la presión que recae sobre mis hombros, lo entiendo desde el momento en que Kespian pasó las suyas con honores hace 2 años.
- Está bien. Lo haré.
- ¡Esoooo, dwarf! Ya verás que traeremos el siguiente honor a esta casa, nadie nunca más se meterá contigo – Kespian soltó un grito que punzó la parte trasera de mi cabeza, mi madre me abrazó emocionada mientras me repartía besos.
- Vale, vale pero no grites... ¿Dónde está papá?
- Tu padre está preparando tu armadura, él sabía que lo aceptarías, vale, levantate ya que necesito ir a alimentar a Trisha.
“Vaya... al menos alguien tiene fé en mí...”
…
- Mirale el lado positivo Trish, tus pruebas se retrasarán otro año, anda... caminaremos unas horas más para acercarnos a Tiquanda y poder estar cruzando al norte de ella mañana.
- ¿Volveremos a ver a papá Eli?
“No lo sé”... es lo que en mi mente resonó sin embargo dejé que la pregunta de la pequeña Trish se apagara en el silencio de la noche y ella entendió que era uno de esos momentos en que tenía que ser valiente.
By: Michizita
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